Cargando con una pena
qué es dura de soportar
me dejasteis solo con ella
nunca de vos supe más.
Se qué no debo quejarme
más cargados haberlos abra
pero cada cual lleva lo suyo
no, se fija en los demás.
¿Donde estáis ahora?
Qué os necesito más que nunca!!
Nadie se acuerda en está hora
de lo mí recibido.
Cuando no cargaba pena
por vosotros desvivido
en cada tropiezo vuestro
mi mano, siempre tendida.
!No es esto un reproche!!
Lo hice de corazón, más volvería hacerlo
sin esperar nada, como nada recibí.
Tampoco deseo pena para nadie de vosotros
no, es cebéis con la mía
lo único que os pido.