Hacía más de veinte años que no cruzaban palabra, hoy sin saber porque, los dos se quedaron mirando.
Ella, fue su primer amor y él, quien le diera el primer beso; solo contaban con diez y seis años, es ese primer amor, que perdura por los años, el que nunca se olvida, el más bello de todos. No los separo la vida si no, sus familias; querían para su única hija un partido más alto, sin pensar si sería feliz con lo que esté le diera.
Aún hoy, al darse un beso en la mejilla, sus cuerpos se estremecen como hace veinte años, se piel se ruborizo, como en aquel primer beso, dos décadas antes.
El destino quiso devolverles los años robados, esos que perdieron sin culpa ninguna. Cuando se dieron cuenta, sus cuerpos estaban desnudos, disfrutando de las caricias, como dos adolescentes que nunca habían sentido, los placeres de la vida.
No se sentían culpables, era una asignatura pendiente que nunca terminaron, tampoco culpan a nadie, quizás solo nacieron, en unos años diferentes.
No se dicen adiós porque nunca se despidieron, ni veinte años antes, ni ahora tampoco. Quizás no se encuentren más, en lo que les quede de vida, pero por una sola vez, sintieron la pasión y libertad, sin que nadie les impidiera demostrarse a cada uno, lo mucho que aún se querían.
Hacia veinte años………………………..
No hay comentarios:
Publicar un comentario