Lo cogió en sus brazos con lágrimas en los ojos viendo su
mirada clavada en la suya, viendo como se le iba la vida. A su mente vino lo
mucho que recibió en los años que pasaron juntos, las alegrías recibidas, las
caricias de cariño que de él recibiera. Él fue el único que estuvo a su lado
cuando un maldito accidente le cambio la vida, no le reprocho jamás que se
volviera tirano cuando quedo postrado en la cama y tenía que depender de otros. Durante los años que
le duro este amargo trago que la vida le dio, él siempre estuvo a su lado,
mientras sus amigos y parte de su familia lo dejaron de lado. Fue el único que
nunca se apartó de la vera de su cama, el que estuvo a su lado en la larga
rehabilitación de dolor, así como cuando la depresión se apodero de su amigo el
que no quería vida, él era el único que evito que hiciese una locura y volviese
por el tiempo a ser el que fuera siempre. Hoy llegada su partida su amigo está
a su lado dándole parte de lo mucho que recibiera, nunca le pidió nada, solo un
acaricia le bastaba para ser
recompensado. Partió tranquilo, por el simple hecho, de sentir el calor de sus
brazos el calor de su amigo humano, cuando cerró los ojos, pudo ver las
lágrimas de amor y dolor sinceras con el que compartiera su vida de penas y
alegrías.
Lo cogió en sus brazos como si de un hijo se tratara,
porque como un hijo se portó en vida……………..
No hay comentarios:
Publicar un comentario